The Police y su canción King of Pain, una declaración sobre la desesperación existencial
Déjen a The Police publicar quizás la declaración más angustiante de desesperación existencial que haya entrado alguna vez en el Top 5 del mundo del pop.
Déjen a The Police lanzar quizás la declaración más angustiada de desesperación existencial que jamás haya entrado en el Top 5 del mundo del pop. Después de todo, acababan de llevar la canción más acosadora, la engañosamente romántica “Every Breath You Take”, al puesto numero 1. Y su primer gran éxito en los Estados Unidos fue “Don’t Stand So Close to Me”, una melodía insidiosamente pegadiza sobre un maestro de escuela potencialmente pervertido. Así que ya el trio era experto en producir éxitos pop transgresores.
Cuando comenzaron las sesiones de grabación de lo que sería su último álbum juntos, "Synchronicity" del año 1983, el trío se encontraba en un estado de agotamiento físico y espiritual. Y los problemas que aquejaban a Sting, en concreto, iban más allá del grupo y su carrera. Él y su primera mujer acababan de separarse tras el nacimiento de su segundo hijo y su vida personal estaba sumida en un tumulto. Curiosamente, el lugar donde tuvo que enfrentarse a sus sentimientos fue la residencia jamaiquina que había pertenecido al autor de James Bond, Ian Fleming, donde el cantante se alojaba con frecuencia durante esos años.
En 1993, Sting le dijo a la revista Q: “En ese momento, mi matrimonio ya se había roto y yo me senté en el escritorio donde Ian Fleming había escrito los libros de James Bond y escribió tres de los mas grandes éxitos de The Police 'Every Breath You Take', 'King of Pain' y 'Wrapped Around Your Finger'. Eso realmente me ayudó. Fue un verdadero proceso de curación”.
Al relatar la evolución lírica de “King of Pain”, le dijo a Vic Garbarini, de Musician, “evoqué símbolos de dolor y los relacioné con mi alma. Una mancha negra en el sol me pareció una imagen muy dolorosa, y sentí que era mi alma allí arriba en el sol. Se trata simplemente de proyectar tu estado en el mundo del simbolismo, que es de lo que se trata la poesía, en realidad”.
Cuando el grupo se reunió en la isla de Montserrat en el Caribe para grabar su album "Synchronicity" en los Air Studios de propiedad del gran productor George Martin, crearon una canción que alterna entre el minimalismo de enfoque preciso y el barrido cinematográfico Technicolor, con Stewart Copeland pasando de líneas de marimba pacientes a golpes de caja con chasquidos según lo exija el momento. Cuando Andy Summers toma vuelo en el solo de guitarra, es como si se abriera una ventana y toda la angustia que se agita en la canción de repente se eleva a través de ella, dirigiéndose en un majestuoso vuelo kamikaze directo a esa mancha negra en el sol.
“King of Pain” llegó en el momento cumbre de la popularidad de The Police, pero la canción siguió hablando a la gente mucho después de haber sobrevivido al grupo. Las versiones que surgieron en las décadas siguientes dieron fe de su atractivo atemporal y su adaptabilidad. ¿Cuántos otros éxitos de taquilla de los años 80 puedes recordar que tuvieron una delicada interpretación acústica de Alanis Morissette en 1999 y una nueva versión a todo trapo de Mudvayne en 2008?